Marvin Hernández y Xavier Saavedra pasaron su adolescencia escuchando música de la región norte de México. Ahora, con casi 50 años, comparten esa misma música con las comunidades de New Hampshire a través de su banda Arrazadores de la Sierra. La llamaron así en nombre a otras grandes bandas populares de su país de origen.
Comenzaron el grupo en 2012, pero desde entonces, su amistad los ha empujado a incursionar en otros negocios también. Tienen un minimarket y un restaurante donde su banda y otras tocan regularmente.
Sus trabajos diarios consumen la mayor parte de su tiempo, pero ambos dicen que no podrían vivir sin hacer música. Entonces, cada dos semanas durante la última década, han sacado tiempo para practicar.
A menudo tocan en quinceañeras, cumpleaños y bodas, pero a veces también tocan en festivales Latinos, como el organizado en la parroquia Saint Aloysius of Gonzaga en Nashua este fin de semana.
Saavedra no puede recordar con precisión cuándo comenzó a tocar música, pero sabe que fue a una edad temprana. Ha tocado para otros grupos pero siempre quiso crear el suyo. Con Arrazadores, vio la oportunidad de presentar la música de Banda a las audiencias locales Latinas y estadounidenses.
Después de todos estos años, Saavedra dice que a veces se pone ansioso antes de tocar, pero después de dos o tres canciones, se olvida de los nervios.
“Trabajo muy duro durante la semana”, dijo, “así que cuando estoy en el escenario, me relajo”.
Los músicos de Arrazadores dijeron que los últimos dos años de pandemia han sido duros.
Hernández, el cantante principal, dijo que la vida no tiene sentido sin música, y que no tener la oportunidad de tocar durante el confinamiento y restricciones por el COVID fue difícil. Eso es parte de lo que hizo que el festival de este fin de semana fuera tan emocionante.
“Nos estamos adaptando nuevamente”, dijo Hernández. “Pero poder traer de vuelta la Banda a nuestra gente se siente muy bonito”.
Ahora, los músicos dicen que se sienten recargados. Los Arrazadores tocaron durante tres horas bajo el sol en el festival de este fin de semana en Nashua, mientras la gente se movía al son del acordeón al esperar en las largas filas de los kioscos de comida.
Hernández y Saavedra dicen que están encantados de estar de vuelta en el negocio.
